EL ENTRENAMIENTO DE FUERZA ha demostrado beneficios en la disminución de peso y en el control glucémico de estos pacientes con estos problemas, ya que reduce la resistencia a la insulina y niveles de insulina plasmática en sujetos hiperinsulinémicos debido a un aumento en la sensibilidad de la insulina por el consumo de glucógeno muscular durante el ejercicio, mejorando el sistema de transporte de glucosa dependiente de la insulina, y por ende incrementa el consumo de glucosa de tal forma que mejora la tolerancia a la misma, disminuyendo sus niveles sanguíneos y los de hemoglobina glucosilada.